A más de dos meses de comenzar el confinamiento en el estado de Jalisco, los resultados de productividad en las empresas comienzan a ser notorios, arrojando resultados de desempleo considerables. Sin embargo, aunque nadie esperaba que esto sucediera, dentro de las oportunidades que ha presentado la pandemia por el covid-19, ha surgido una dinámica laboral que ha permitido a muchas empresas sobrevivir la tormenta y continuar trabajando: el home office.
Si bien es una dinámica que se ha ido gestando lentamente dentro del país y que exigen cada vez más las generaciones de empleados más jóvenes, con la nueva situación sanitaria se han tenido que acelerar los procesos de adaptación a esta nueva forma de trabajo a distancia, y no en todos lados los resultados han sido negativos.
Según la revista Forbes, el ir diario al lugar de trabajo se ha convertido en una manera de trabajar obsoleta, que no responde a las verdaderas necesidades del trabajador, y más bien obedece a jefes que se rehúsan a entender nuevas formas de producción.

En las palabras de Diana Mulcahy, colaboradora en la revista: “No hay ni un estudio que sugiera que trabajar en una oficina ocho horas al día, cinco veces por semana, maximice la productividad, la satisfacción o el rendimiento de un trabajador. Ni uno.” De hecho, un artículo de Inc.com sugiere que, de ocho horas al día, un empleado es productivo 2 horas y 53 minutos. Esto debido a actividades como distracciones en redes sociales, platicando con compañeros en la oficina o alargando los horarios dedicados a comer.
La magnitud de la cuestión de regresar a las oficinas o no es tal, que incluso las grandes compañías en el centro de Manhattan consideran si en realidad es necesario llenar edificios con 7,000 personas que de todos modos no están aprovechando al máximo su tiempo ni convirtiéndolo en rendimiento.

Todo lo anterior, aunado a las nuevas medidas de higiene que se implementarán aún después de la contingencia, como mantener distancias y asegurar la limpieza constante en los espacios de trabajo hace que la pregunta de si mantener la dinámica de home office valga la pena, aún después de la crisis por coronavirus.

Otras razones que pueden ayudar a pensarlo mejor son estas razones que publica la revista Entepreneur:
- Tus empleados pasarán menos tiempo transportándose, y en caso de que lo hagas, te ahorrarás los vales en gasolina.
- Serán más productivos.
- Serán más felices.
- No tendrás que invertir en espacios o material de oficina.
- No tiene que ser un trabajo 100% virtual. Puedes establecer horarios mixtos en los que todo tu equipo se vea personalmente.
¿Todavía dudas que sea una buena idea?
Déjanos en tus comentarios tu experiencia trabajando a distancia.